¿Habéis leído alguna vez el libro “Meet Me at
the Cupcake Cafè” de la escritora Jenny Colgan? ¿No? Pues entonces os aconsejo
que lo leáis. Es un libro perfecto para leer en un día lluvioso, sentada en un
buen sofá cómodo , con una tazza de té bien caliente y, quizás también, ¡con
una mantita por encima de las piernas! El libro cuenta la historia de una chica
llamada Issy que intenta realizar sus sueños, es decir abrir una pequeña
cafetería dónde vender sus cupcakes y otros pastelitos que hace ella y además .
. . cuenta una bonita historia de amor. . . con Issy como protagonista . . . pero,
¡ya no os cuento más! Añado sólo que en el interior del libro hay muchísimas
recetas super golosas y de hecho la receta que os voy a explicar a continuación
es una de las del libro (con alguna pequeña modífica).
Qué os
parece, ¿empezamos?
Cupcakes rellenos de mermelada de fresas
(para 12 cupcakes):
125 g
de harina 00
125 g
de azúcar
100 g
de mantequilla (reblandecida)
2
huevos medianos
60 ml
de leche
8 g de levadura en polvo
1
cucharadita de extracto de vainilla
Mermelada
de fresas
Precalentamos
el horno a 160° y mientras vamos poniendo en la fuente para muffins los
papelitos para cupcakes. Batimos la mantequilla junto con el azúcar hasta que
obtengamos una mezcla cremosa y luego
añadimos los huevos. A continuación añadimos la mitad de la harina mezclada junto con la levadura. Añadimos luego
la leche con el extracto de vainilla e incorporamos
el resto de la harina. Repartimos la mezcla entre los papelitos para cupcakes,
rellenándolos unos 2/3, a mi me viene con una cuchara bien llena, no hay
necesidad de aplanar la masa, una vez que meteremos la fuente en el horno la
masa bajará sola. Lo dejamos en el horno durante unos 15-20
minutos aproximádamente, cuando veáis que se vuelven doraditos por encima
pichad los cupcakes con un palillo, si éste sale limpito entonces ya están.
Dejamos reposar un minuto los cupcakes y luego los sacamos y los ponemos a
enfriar encima de una rejilla, no los dejéis mucho tiempo dentro del molde de
muffins porque el calor los sigue cocinando y ¡ los papelitos se podrían
despuegar de los cupcakes! Ahora metemos un poco de mermelada dentro de la
manga pastelera y con una boquilla a forma de embudo metemos un poco de
mermelada dentro de cada cupcake (deberíamos
ver como si el cupcake engordara).
Buttercream de merengue suizo de mermelada de
fresas:
4 claras
de huevo
250 g
de mantequilla
250 g
de azúcar
4
cucharadas de mermelada de fresas (sin semillas)
Lo primero que hay que hacer es cortar la
mantequilla (a temperatura ambiente) en cubitos. Después derretimos el azúcar
junto con las claras de huevo a baño maría, es decir, metemos el azúcar y las
claras dentro de un bol metálico y lo apoyamos encima de un cazo con agua muy
caliente (pero no hirviendo) girando sin parar para evitar que el huevo se
cueza, y seguimos hasta que el azúcar se haya disuelto por completo. Puedes
hacer una prueba cogiendo una gotita con los dedos para sentir si ya no quedan
gránulos del azúcar (¡cuidado no os vayáis a quemar!). Retiramos el bol del
agua y batimos las claras hasta que aumenten de volumen y se enfríen por
completo, debe de tener el aspecto de merengue, bien blanca y densa. A
continuación añadimos la mantequilla, un cubito a la vez mientras continuamos a
batir; en esta fase hay que tener muchísima paciencia porque al principio tendrá
un aspecto horrible, como la mayonesa cuando se corta pero tenéis que resistir
y seguir batiendo, ¡veréis que luego mejora! Una vez que vuestro merengue se
haya compactado y habrá adquirido una consistencia cremosa podemos añadirle la
mermelada y batir durante pocos minutos. Ahora podemos meter nuestra crema
dentro de la manga pastelera y ¡divertirnos a decorar! Yo he usado una boquilla
de 10 mm de diámetro, empezando desde el exterior hacia el interior y luego he
añadido una flor de azúcar que compré en el supremercado.
¡Hasta
la próxima receta!
Besitos,
Dewi
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